Los museos necesitan adaptarse a una sociedad en continuo cambio
Un curso de verano busca aportar métodos y recursos para que los museos puedan sobrevivir como lugares de conocimiento y ocio
11/07/2014. Los museos del siglo XXI no pueden permanecer impasibles a los constantes cambios a ritmo de vértigo de una sociedad globalizada. Las profesoras de la Universidad de Extremadura Ángela Alonso Sánchez y Rosa Perales Piqueres han abierto el debate en torno a la necesidad de adaptación que deben afrontar los museos para continuar ejerciendo su función como lugares de conocimiento y ocio.
Dirigen el curso de verano titulado “Los nuevos museos del siglo XXI. La renovación de los presupuestos museológicos y museográficos. Iberoamérica” que ha aportado métodos y herramientas para que estos centros sean accesibles y estén abiertos a todo tipo de público a través de las nuevas tecnologías. “Son los museos de la sociedad del ocio, compitiendo con una gran variedad de ofertas culturales, intentando hacerse un hueco entre ellas e intentando satisfacer las demandas de un público muy variado” explica Ángela Alonso.
Estos nuevos museos conviven con los viejos museos que también se encuentran inmersos en un proceso de transformación “el museo ha pasado de ser el santuario de las musas, el lugar donde se conservan las grandes obras de arte de la humanidad, al lugar de encuentro de las masas” manifiestan las directoras. Pero este proceso no es fácil y a muchos museos les cuesta “dejar de ser esos santuarios” e incorporarse a las nuevas demandas del siglo XXI, la sociedad de la información sometida a las nuevas tecnologías y a otros formas de presentación en las salas de exposición permanente.
El uso de las nuevas tecnologías
Los museos se están dando cuenta de que son la puerta al pensamiento crítico de la sociedad y deben formar parte de ella como un centro accesible y abierto a todo tipo de público. Los museos se han propuesto desarrollar el concepto de participación ciudadana empleando las nuevas tecnologías.
El papel que desempeña internet es imprescindible. La red permite visitas virtuales sin necesidad de desplazamiento y ofrece información detallada de todas las actividades del museo. Las colecciones enriquecidas con elementos multimedia obtienen cada día más el favor del público. Los museos llevan a campo proyectos de digitalización y catalogación de recursos para que los visitantes desarrollen experiencias perfectas a través de cualquier dispositivo móvil.
El uso de las redes sociales también amplía las posibilidades de interacción con los visitantes, conociendo en el momento sus gustos e intereses.
España es uno de los últimos países europeos en incorporarse a las nuevas tecnologías, así como a la renovación de los espacios museísticos tradicionales. De ahí la necesidad de realizar este curso que abarca a profesionales de museos, investigadores en todos los campos de las Humanidades, Márketing, Publicidad, así como a estudiantes, arqueólogos e historiadores del Arte.
La exposición temporal
Últimamente, la exposición temporal ha sido el recurso más utilizado por los museos para incorporarse a la sociedad del ocio y la oferta cultural.
Con ellas el museo se renueva constantemente y no da la sensación de inmovilidad que suelen transmitir las salas de exposición permanente. En las exposiciones temporales se utilizan las nuevas tecnologías profusamente, resultando un medio muy eficaz para difundir el gran valor patrimonial de las colecciones y de las obras de arte que, de otro modo, no podrían contemplarse como grandes obras de arte que se encuentran en lugares o en manos de particulares con pocas posibilidades de salir al público. Por otro lado, es un método de atracción hacia el museo que facilita la formación del público a gran escala.
Iberoamérica
Una parte importante de este curso de verano ha estado dedicada a impulsar el conocimiento de los modelos museísticos americanos en España, para diseñar estrategias comunes de cooperación y el desarrollo de acciones conjuntas con países iberoamericanos.
Los museos iberoamericanos tienen una proyección similar a los europeos porque parten de utilizar edificios patrimoniales como contenedores de obras de arte. Los modelos de edificios rehabilitados y adaptados a las nuevas necesidades museísticas que Iberoamérica ofrece es una simbiosis entre la museología anglosajona y la tradición europea del museo templo. Los resultados obtenidos en la actualidad se asemejan a los españoles, ya que parten de edificios construidos en el virreinato español.
En los últimos tiempos se está realizando un intercambio de ideas y planteamientos que ha finalizado con la creación de la plataforma Ibermuseos, potenciada por el ministerio de Educación y Cultura de España, en la que se integra la década del Patrimonio Museológico hasta el año 2022.
El curso de verano de la Universidad de Extremadura, organizado por el Vicerrectorado de Extensión Universitaria, se ha celebrado en la sede de la Fundación Mercedes Calles-Carlos Ballesteros de Cáceres. Ha contado con la colaboración del CEXECI, Centro Extremeño de Estudios y Cooperación Iberoamericana y la Dirección General de Patrimonio Cultural del Gobierno de Extremadura.