La Facultad de Formación del Profesorado conciencia a los estudiantes sobre la violencia de género en la adolescencia
Helena García Mariño, de Save the Children, ha presentado el estudio “No es amor. Un análisis sobre la violencia de género entre adolescentes”. El informe alerta de que las pautas violentas se perciben con total normalidad e incluso como amor. Tras la presentación, se ha organizado un coloquio y se ha dado lectura a un manifiesto
24/11/2021. La Facultad de Formación del Profesorado ha organizado la presentación-coloquio del estudio “No es amor. Un análisis sobre la violencia de género entre adolescentes”, por Helena García Mariño de Save the Children.
La actividad se realiza con motivo del 25 de noviembre Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Contra las Mujeres y dentro de la programación de la Semana del Centro con motivo del Día del Maestro, el 27 de noviembre.
Beatriz Muñoz y María Ángeles Serrano son las profesoras del centro, del Departamento de Sociología, que han coordinado esta actividad. “La última macroencuesta de violencia de género aporta datos preocupantes, uno de ellos es el aumento de la violencia de control y el incremento de las agresiones sexuales, incluso también dentro de la pareja”, destaca Muñoz.
Esta actividad se centra en la concienciación sobre la violencia de género en los jóvenes por dos motivos. En primer lugar, porque los estudiantes universitarios son adolescentes y pertenecen a esa franja de edad, pero “además, van a ser futuros profesionales que van a trabajar con estos colectivos en la educación Primaria y Secundaria. Pretendíamos también abrir un espacio para darles las herramientas que les permitan detectar la violencia de género en adolescentes”, señala María Ángeles Serrano.
Los datos muestran que hay poca autopercepción tanto de ser víctimas como de generar esta violencia. En esta franja de edad, se experimentan las primeras relaciones sentimentales en las que se normalizan en ocasiones situaciones de violencia de género. Los jóvenes no identifican las situaciones de abuso o de control. La violencia de control es la más común en estas edades, con el control del móvil, de la vestimenta, de donde están ubicados en cada momento, con quién están…
El estudio
Helena García Mariño es Licenciada en Derecho y Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Madrid y en Literatura Comparada por la Universidad Complutense de Madrid. Ha trabajado como abogada de violencia de género y asesora legal. Entre 2015 y 2019 ha sido profesora en The University of Iowa y The University of Houston. Actualmente trabaja en el departamento de Incidencia Social de Save the Children, donde se encarga del desarrollo de formaciones.
El estudio, presentado por García Mariño de manera virtual, realiza una aproximación a la situación de la violencia de género en la adolescencia, enfatizando sus rasgos definitorios con relación a otras edades, pues víctima y agresor son menores de edad y están sujetas a la protección de la Convención de Derechos del Niño, por un lado, y existe una dificultad en establecer la propia definición de relación. Las relaciones afectivas comienzan cada vez más precozmente sin convivencia y sin un proyecto en común, y su desarrollo online de corta duración, pero gran intensidad, enfrentan a múltiples y variadas situaciones de dominio, control y maltrato psicológico y físico del varón sobre la mujer –alimentadas por los estereotipos e ideas sexistas que circulan por las redes–, que constituyen la esencia de la Violencia de Género, pero que difícilmente pueden incluirse en el concepto de relación afectiva que exige el Código Penal.
El estudio explora las causas, características y magnitud de la violencia de género entre adolescentes, poniendo especial hincapié en la violencia de control, al ser la forma de violencia más común en estas edades.
Se aborda la necesidad de erradicar los estereotipos sexistas y la promoción de masculinidades alternativas a la tradicional, así como la dimensión de la violencia y las consecuencias de la misma para las víctimas. Se señala que muchas de las conductas violentas no llegan a ser detectadas, son incluso normalizadas y no tienen unas consecuencias claras para los agresores.
El trabajo de investigación también recoge algunas recomendaciones. Para erradicar la lacra de la violencia es esencial incorporar a los adolescentes en las políticas públicas que atienden a la violencia de género, especialmente en la prevención. Hay que revisar los modelos y referentes, porque si no, los adolescentes repetirán conductas y patrones violentos, aprendidos desde la primera infancia, que les afectarán en el resto de sus vidas.
Los recursos deben adaptarse a las necesidades y realidades de víctimas y agresores: el lenguaje, las estrategias de comunicación y las propias intervenciones han de adaptarse a las particularidades (y dificultades) de este periodo y a las características específicas de esta forma de violencia.
Coloquio
Tras la presentación de los resultados de la investigación, se ha celebrado un coloquio con el alumnado y los representantes de la sociedad civil y las instituciones colaboradoras: Ayuntamiento de Cáceres/Oficina de Igualdad de Cáceres, Save the Children y la Plataforma de Mujeres por la Igualdad de Cáceres.
El acto se ha cerrado con la lectura de un manifiesto.