Un curso de verano da a conocer los fundamentos de la Teoría Moderna de la Moneda
Participan importantes economistas nacionales e internacionales. Está dirigido por los profesores de la UEx Esteban Cruz y Francisco Manuel Parejo
12/07/2021. La Teoría Moderna de la Moneda (TMM), una escuela de pensamiento surgida a finales de los 90 del siglo pasado, ha agitado el campo de la economía política a raíz de la crisis financiera global ante la cual las escuelas dominantes manifestaron dificultades para analizar sus causas y proponer soluciones eficaces. La TMM ha conseguido atraer a numerosos activistas y especialistas de otras disciplinas que están produciendo propuestas novedosas para afrontar nuestros problemas como el Green New Deal y abordajes originales en otras disciplinas como el derecho.
Con el propósito de dar a conocer los fundamentos teóricos de la TMM presentados por algunos de sus proponentes más destacados, los profesores de la Universidad de Extremadura Esteban Cruz y Francisco Manuel Parejo han organizado el curso de verano “La Teoría Moderna de la Moneda: fundamentos y retos sociales”, que se desarrolla de manera virtual del 12 al 14 de julio. Cuenta con la colaboración de la Red MMT (Teoría Monetaria Moderna).
En el acto inaugural, Francisco Manuel Parejo ha agradecido a la Red MMT su predisposición a facilitar contactos de gran calidad para que el seminario cuente con “ponentes internacionales de máximo nivel en este tema”. En este aspecto, Esteban Cruz ha destacado que gracias a los referentes nacionales e internacionales con los que cuenta el programa, el curso ha obtenido una gran respuesta de alumnos.
Stuart Medina Miltimore, presidente de Red MMT y economista del sector biotecnológico, ha subrayado que este tipo de cursos de verano son imprescindibles “porque los programas de macroeconomía están estancados en el tiempo. Es necesario ofrecer visiones diferentes a las que se encuentran en los libros de texto”.
El vicerrector de Extensión Universitaria, Juan Carlos Iglesias Zoido, que ha presidido el acto inaugural, ha declarado que “el formato online ha venido para quedarse porque permite alumnos de otras nacionalidades”. “Estos cursos, añade, son un complemento que buscan llevar cuestiones de máxima actualidad a la academia”.
Este curso de verano es una oportunidad única para poder aprender directamente con economistas internacionales de la talla de Randall Wray, Pavlina Tcherneva, Bill Mitchell, Fadhel Kaboub, Dirk Ehnts, Warren Mosler, Ndongo Samba o Agustín Mario, referentes principales de este enfoque institucional para el análisis económico y la aplicación de políticas. También cuenta con investigadores nacionales que aportan su esfuerzo para el desarrollo de este enfoque, de manera plural y multidisciplinar, como Julián Sánchez, Eduardo Garzón, Carlos García, José Francisco Rangel o Miguel Arjona, entre otros.
La Teoría Monetaria Moderna
La Teoría Moderna de la Moneda parte del estudio del análisis de las instituciones que caracterizan una economía monetaria de producción como es el capitalismo. En base a ello, se estudian las características y elementos claves de su desarrollo y se elaboran una serie de propuestas de política económica para lograr el pleno empleo con estabilidad de precios.
Dado que la moneda es un monopolio público, cuya emisión está cedida parcialmente a los bancos privados respondiendo a la demanda de crédito por parte de los usuarios de moneda, la Teoría Monetaria Moderna propone que, igual que el Banco Central actúa de Prestamista de Último Recurso provocando que el sistema financiero funcione, también actúe coordinado con el Tesoro en función de la demanda de ingresos que haya por parte de los trabajadores desempleados, institucionalizándose la figura del Estado como Empleador de Último Recurso. En lugar de establecer la cantidad que el Estado va a gastar, se establece una regla de precio: el salario mínimo establecido por los programas de Garantía de Empleo. Así, la demanda de ingresos por parte del sector privado definiría el tamaño de estos programas de manera endógena y no sería establecido el gasto público de manera discrecional guiado por criterios morales. Funcionaría como patrón de valor, estableciéndose como ancla al resto de precios de la economía y, también, suavizaría el ciclo económico, inherente a una economía capitalista donde la producción se realiza de manera privada y fragmentada sujeta a incertidumbre.
Los diversos Planes de Trabajo Garantizado elaborados bajo la figura del Estado como Empleador de Último Recurso serían diseñados con objetivos ajenos al ánimo de lucro. Estos pueden estar relacionados, por ejemplo, con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, los cuales de otra forma quedan relegados a las oportunidades de actividades rentables que se abran para que los agentes privados los tengan en consideración. Las oportunidades pueden diseñarse para la rehabilitación vocacional y empleabilidad de grupos sistemáticamente discriminados del mercado laboral, usando el empleo no solo en sentido de creador de plusvalía, como en el sector privado, sino como forma efectiva de integración en la sociedad.
Green New Deal
El European Green Deal es una estrategia que confía en una serie de incentivos para que el sector privado haga frente a la emergencia climática. “Pese al uso retórico que se hace del término, la estrategia es muy diferente al New Deal original, caracterizado por la creación de empleos directos por parte del Estado con el objetivo de transformar la economía del país, creando desde infraestructuras hasta obras de teatro y clases de pintura comunitarias”, explica Esteban Cruz. “Lamentablemente, parece que hay más oportunidades de negocio privado en la propia crisis climática que en su lucha, que queda sujeta a que sea rentable para hacerse efectiva. El reto social y ambiental al que nos enfrentamos es de tal magnitud y urgencia que es una temeridad dejarlo en manos del sector privado”, manifiesta el profesor.
La Unión Europea no debería centrarse en orientar y modificar el comportamiento del sector privado para este fin, sino liderar un verdadero Green New Deal con las herramientas que dispone mediante la coordinación de sus brazos fiscal y monetario, hoy totalmente disociados a pesar del balón de oxígeno que supone la compra de bonos en el mercados secundario por el Banco Central, como parte de la política monetaria no convencional que viene aplicando en los últimos años. “Esto tiene un alcance muy limitado, especialmente bajo el ambiente político reinante que utiliza el presupuesto del Estado como un elemento disciplinante y no como un instrumento de política económica para lograr objetivos macroeconómicos y sociales superiores”, expone Cruz.