La Universidad de Extremadura siente la pérdida de Margarita Salas
Doctora Honoris Causa por la Universidad de Extremadura en 2002, visitó la UEx en numerosas ocasiones
08/11/2019. Margarita Salas, icono de la investigación en España y referente para las mujeres en la ciencia, nos ha dejado. Un sentimiento triste para muchos investigadores que consideran a Margarita Salas su maestra y mentora. A sus 80 años continuaba su trabajo en el laboratorio, ejemplo de constancia, perseverancia e entusiasmo, cualidades indiscutibles de un buen investigador.
Margarita Salas ha sido una mujer pionera, que ha contribuido de manera importante a los avances en el campo de la biología molecular, destacando el descubrimiento y las aplicaciones de la ADN polimerasa del fago Φ29. Comenzó su carrera científica con su marido, el extremeño Eladio Viñuela, en 1964, en el Departamento Científico de Severo Ochoa en la Escuela de Medicina de la Universidad de Nueva York. Regresaron a España para desarrollar la biología molecular, todo un reto a finales de la década de los sesenta.
Margarita Salas siempre ha mantenido una estrecha vinculación y cariño con Extremadura. Miembro de la Academia de Yuste y Doctora Honoris Causa por la Universidad de Extremadura en 2002, visitó la UEx en numerosas ocasiones. La última vez, este mes de febrero con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Durante su conferencia en la UEx, Margarita Salas realizó una brillante alocución en la que narró la historia y aportaciones de mujeres científicas, principalmente del siglo XX, sus progresos, descubrimientos, ilusiones pero también frustraciones y, en algunos casos, ausencia de reconocimiento.
Para esta gran científica, la mujer ha recorrido un camino importante, pero también es cierto que el número de mujeres que en la actualidad alcanzan una posición directiva es muy bajo. Sin embargo, Margarita Salas se declaraba optimista. Estaba segura de que “si las mujeres seguimos luchando e incorporándonos al mundo profesional, en un futuro no muy lejano la mujer investigadora ocupará en la comunidad científica el puesto que le corresponde de acuerdo con su capacidad y su trabajo”.
La comunidad científica llora el fallecimiento de Margarita Salas, pero su memoria y legado seguirán guiando los caminos y aspiraciones de los jóvenes científicos.