15 localidades extremeñas contribuyen a paliar la falta de vocaciones científicas de la mano de la UEx
La Escuela Municipal de Jóvenes Científicos de la Fundación Universidad-Sociedad y la Universidad de Extremadura cuenta desde este curso con el apoyo de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología y continúa creciendo por toda la geografía extremeña
16/05/2016. Hoy en día el concepto de escuela municipal es ampliamente conocido por la sociedad debido al éxito que está cosechando en numerosos ámbitos de la vida cotidiana. Un hecho que ha dado lugar a su proliferación especialmente entre los más jóvenes. Las escuelas municipales deportivas son un claro ejemplo de ello, ya que son las que tienen una implantación más habitual en todo el territorio. Así es fácil encontrar una gran cantidad de ayuntamientos que apuestan por este concepto. Sin embargo, hasta hace poco tiempo nunca se habían ofertado en Extremadura escuelas municipales en el ámbito de la ciencia y la tecnología, probablemente por el desconocimiento de la sociedad ante una necesidad cada vez más palpable: la falta de vocaciones científicas. Desde hace algunos años, son muchos los estudios que hablan de la escasez de profesionales cualificados en estas áreas. Un estudio reciente señala que en el año 2020 harán falta en España más de dos millones de profesionales de este campo. Esta necesidad, junto con el beneficio intrínseco que implica apoyar los procesos educativos en áreas científico-tecnológicas entre los jóvenes extremeños, es la que impulsara a la Universidad de Extremadura a poner en marcha un proyecto piloto hace ya seis años, origen de la actual Escuela Municipal de Jóvenes Científicos (EMJC).
Las EMJC trabajan con jóvenes estudiantes de secundaria y segundo ciclo de primaria, convirtiéndolos en protagonistas de la ciencia y la tecnología extremeña. Mediante talleres semanales desarrollados en localidades de Badajoz y Cáceres, los jóvenes tienen la oportunidad de enfrentarse cada semana a un reto que les hace tomar contacto con estas áreas. Esta conexión directa les permite entender de forma práctica cuestiones como por qué un avión se sostiene en el aire, cuál es la mejor estructura para un edificio, o cómo se programa una aplicación móvil entre otros muchos asuntos.
Expansión
Las Escuelas Municipales de Jóvenes Científicos son ya una realidad en toda la geografía extremeña. Con el apoyo de la FECYT, la Fundación Universidad-Sociedad de la Universidad de Extremadura y la UEx, están dando un nuevo impulso a este proyecto que ha crecido un 25%, entre enero y abril de 2016, llegando a trabajar con más de 270 niños de forma permanente en 15 localidades extremeñas, y más de 3000 alumnos en talleres de difusión.
La materialización de este proyecto ha sido posible gracias a la visión de futuro de numerosos alcaldes extremeños: Fuente del Maestre, Santa Marta, La Parra, Almendralejo, Guareña, Lobón, Torremejía, Calamonte, Puebla de la Calzada, Montijo, La Garrovilla, Valdivia, Casas de Don Pedro, Casar de Cáceres y Montehermoso. Su participación directa como socios del proyecto ha permitido que cada municipio sea sede de las EMJC, y que semanalmente los jóvenes puedan desarrollar sus proyectos guiados por profesores especializados. Próximamente los alumnos presentarán estos proyectos en la Feria de la Ciencia, que cada localidad organiza para que sus participantes puedan mostrar el trabajo a su comunidad: familiares, profesores y público en general, quienes podrán dialogar con los protagonistas para conocer sus inquietudes e intereses. Los mejores proyectos viajarán a la Gran Final de la Feria de la Ciencia que se celebrará a finales del mes de septiembre. Sus creadores, y también sus compañeros, participarán en una jornada de concurso festiva donde cada localidad mostrará lo mejor de sí misma.
Visión de futuro
Aunque la huella de la EMJC parece imparable, consideran que aún quedan muchas localidades a las que llegar y transmitir su entusiasmo y visión de futuro. Por esta razón, el equipo ha puesto en marcha un plan de difusión que está permitiendo desarrollar talleres puntuales en localidades y centros educativos en los que desean poner en marcha estas nuevas escuelas municipales. En estos primeros cuatro meses de 2016 se han desarrollado múltiples actividades de difusión en las que han participado miles de alumnos de primaria y secundaria y que les ha permitido, entre otras cosas, entender cómo se pueden programar directamente los robots con los que semanalmente los jóvenes científicos trabajan.
La EMJC es un proyecto vivo, que se adapta a las necesidades del entorno que nos rodea. Además de continuar la promoción y expansión en nuevas localidades, en la segunda mitad de año desarrollarán nuevas actividades que den respuesta a la demanda social. En particular se trabajará más intensamente con chicas para buscar soluciones a largo plazo al problema de desigualdad de género: sólo un 10% de estudiantes de informática son mujeres en la actualidad. Pero además se ofrecerán talleres complementarios especializados a aquellos jóvenes con inquietudes específicas en el área de tecnología.
FUEx – Presentación Escuela Municipal Jóvenes Científicos 2016 from ondacampus on Vimeo.