La aplicación de medidas sanitarias reduciría la mortalidad del jabalí
En su tesis, David Risco propone soluciones para combatir enfermedades como la tuberculosis, la brucelosis, el mal rojo o la pasteurelosis. Estas infecciones suponen un grave riesgo de contagio para la cabaña doméstica como el cerdo ibérico. El estudio plantea la vacunación y reducir la densidad de jabalíes en las zonas conflictivas
30/12/2014. En Extremadura, el jabalí constituye la principal especie cinegética, tanto a nivel de captura como por venta de carne. La importancia económica que ha adquirido en el sector, ha provocado el aumento de la densidad de las poblaciones de jabalí, hecho que ha favorecido la transmisión de infecciones y la aparición de nuevas patologías, con brotes de enfermedades hasta ahora desconocidos en este tipo de animales.
David Risco Pérez ha determinado en su estudio que, enfermedades infecciosas del jabalí como la tuberculosis y la brucelosis, suponen un grave riesgo para los animales domésticos. También se han detectado que el mal rojo y la pasteurelosis, enfermedades relacionadas con el cerdo ibérico de montanera, han provocado una alta mortalidad en las poblaciones de jabalí.
La tesis concluye que reducir la densidad poblacional de los jabalíes, con medidas como el aumento de la presión de caza, puede ser útil para luchar contra la brucelosis. Este patógeno se puede transmitir desde el jabalí al cerdo doméstico en zonas donde sea criado en condiciones extensivas.
El estudio ha demostrado que los animales que tienen tuberculosis y están infectados con otros virus, como la enfermedad de Ausjeszky o infecciones respiratorias, desarrollan formas clínicas más graves de tuberculosis, que afectan a más individuos y por lo tanto entrañan un mayor riesgo para el ganado doméstico.
Para reducir la gravedad de los cuadros de tuberculosis o combatir el mal rojo y la pasteurelosis, se propone la aplicación de medidas sanitarias tales como la desparasitación, la vacunación (a través de capturas en animales jóvenes o en cebos en jabalíes adultos) o la aplicación de tratamientos antibióticos. “Todos estos tratamientos se han realizado de manera experimental, no son legales porque ahora mismo la Ley de Sanidad Animal no contempla realizar acciones sanitarias en poblaciones cinegéticas. Hemos demostrado en estudio científico que es necesario que la ley recoja este tipo de acciones” explica David Risco.
Los patógenos del jabalí tienen una triple importancia: en sanidad animal, porque suponen un riesgo para la cabaña doméstica; en salud pública, porque son patógenos zoonósicos que pueden afectar a las personas e importancia ecológica, porque existe la posibilidad de poner en peligro la salud de otros animales salvajes.
El estudio ha sido dirigido por Javier Hermoso de Mendoza Salcedo, Luis Gómez Gordo y Pedro Fernández Llario.