Enrique Moradiellos: “Europa se construye sobre la renuncia a la guerra y con el sólido respeto a los derechos humanos”

Un curso internacional de verano, organizado por la Universidad de Extremadura y la Fundación Academia Europea de Yuste, aborda, desde una perspectiva histórica, las relaciones del proceso de integración europea

/* Style Definitions */
table.MsoNormalTable
{mso-style-name:”Tabla normal”;
mso-tstyle-rowband-size:0;
mso-tstyle-colband-size:0;
mso-style-noshow:yes;
mso-style-priority:99;
mso-style-parent:””;
mso-padding-alt:0cm 5.4pt 0cm 5.4pt;
mso-para-margin:0cm;
mso-para-margin-bottom:.0001pt;
mso-pagination:widow-orphan;
font-size:10.0pt;
font-family:”Calibri”,”sans-serif”;}

08/07/2014. “Una sociedad no sólo está construida por una masa de individuos o por un territorio. Su identidad, su historia y sus raíces, juegan un papel crucial para conocer sobre qué renuncias se inició el proceso de integración y hacia dónde camina la Unión Europea. No debemos perder de vista que la UE es un proyecto constituido bajo la base de que nunca más se produzca una guerra entre europeos o se genere un estado racista que asesine impunemente a los ciudadanos. También sobre el respeto de los derechos humanos como criterio básico para la actividad estatal”. De esta forma, ha resumido el catedrático y profesor de Historia Contemporánea de la UEx, Enrique Moradiellos García, la importancia de la memoria colectiva en el contexto de integración de la Unión Europea.

En este sentido, el experto de la universidad extremeña ha recordado que Europa debe entenderse como el mecanismo a partir del cual han podido ser superados los procesos pasados de violación de los derechos humanos, como el fascismo, el totalitarismo, el racismo y el genocidio.

Así, en su opinión, es el marco comunitario actual el que garantiza que situaciones como el holocausto nazi, con el que se intentó exterminar a la totalidad de la población judía de Europa por ejemplo, no volverán a sucederse.

“Los ciudadanos europeos tienen derechos inviolables que no se pueden neutralizar en ninguno de los estados miembros. Y esto, es parte esencial de la concepción política de Europa, limitar el poder del estado precisamente para evitar situaciones y experiencias como las vividas durante los nacionalismos en Italia o Alemania, entre otros”, ha explicado Moradiellos.

De ahí que, a su juicio, sólo plantear la posibilidad “de deshacer lo andado, y volver a una situación anterior a la creación de esta comunidad internacional, sea una idea suicida”. Así lo ha indicado Moradiellos quien, además, ha resaltado el estado de bienestar y estabilidad que garantiza esta comunidad política de la que en la actualidad forman parte 28 países.

A este respecto, desde la óptica de Moradiellos, las ventajas de pertenecer a la Unión Europea son innegables. Según ha sugerido “es cierto que pertenecer a Europa ha traído aparejados una serie de ajustes y sacrificios, pero no haber formado parte de ella en una situación de crisis como la que hemos vivido, y de la que estamos saliendo, habría sido mucho peor. Recordemos sino lo que trajo la crisis del 29. Sólo aspectos negativos como el fascismo, la guerra civil, el colapso institucional… y, por supuesto, la vuelta a una Segunda Guerra Mundial que esta vez no acarreó 12 sino 60 millones de muertos”.

Aun así, el historiador de la Universidad de Extremadura ha reconocido que a Europa le quedan aún por superar algunos retos importantes. Entre otros logros, según el profesor de la UEx, aún es necesario encontrar estructuras eficaces de gestión que permitan llegar a un consenso en planos como el jurídico, el político, el cultural e incluso el académico. “Lo que aún es un desafío es encontrar un mínimo común denominador, para que dentro de la idiosincrasia de cada país, todos los estados miembros trabajen cómodamente en el contexto internacional”.

Miradiellos ha hecho estas declaraciones en el marco del curso internacional de verano de la UEx titulado “La memoria y lugares de memoria de Europa en el proceso de construcción europea”. Este seminario, que el mismo dirige y que se desarrollará hasta mañana miércoles, en el Real Monasterio de Yuste, reunirá en un mismo foro a académicos, analistas y protagonistas directos en el proceso de configuración de esta comunidad política internacional.

De hecho, el objetivo de este encuentro es abordar y estudiar desde perspectivas pluridisciplinares las relaciones entre historia, memoria y presente actual en los procesos de integración europea.

Cabe destacar, además, que durante las jornadas del curso estará expuesta en la sede de la Fundación Academia Europea de Yuste la colección de fotografías “Los cien años de soledad del intérprete: entre la historia y la memoria”, comisariada por Icíar Alonso y Jesús Baigorri de la Universidad de Salamanca.