El Servicio de Técnicas Aplicadas a la Biociencia apuesta por la investigación de compuestos farmacéuticos personalizados para el tratamiento de la obesidad

Conseguir una medicina personalizada a través de la administración de fármacos adecuados y adaptados al paciente es el objetivo final del proyecto Humanfarma, en el que colabora el Servicio de Técnicas Aplicadas a la Biociencia de la Universidad de Extremadura
26/04/2012. El Servicio de Técnicas Aplicadas a la Biociencia (STAB) ofrece una sólida experiencia y conocimientos científicos en el desarrollo de compuestos farmacéuticos personalizados. Según Alberto Álvarez, responsable del servicio, “queremos llevar directamente al enfermo los fármacos adecuados”.
La contribución del STAB al proyecto Humanfarma se acaba de formalizar a través de la firma de un acuerdo de subcontratación, según el cual desarrollará ensayos funcionales en muestras de pacientes. Gracias a este convenio, con una vigencia de dos años, el STAB va a recibir 94.000 euros para el desarrollo de la investigación. Está previsto que la Universidad de Santiago de Compostela, socio de Humanfarma, revise cerca de 30.000 a 50.000 compuestos gracias a la tecnología puesta en marcha por el STAB. De esta manera se seleccionarán las sustancias eficaces en la localización de los puntos de acción de los compuestos farmacéuticos y, por tanto, se administrará al enfermo el fármaco adecuado.
Los ensayos están dirigidos específicamente a la búsqueda de nuevos compuestos que incidan en el tejido adiposo y en la termogénesis, la capacidad de generar calor en el organismo debido a las reacciones metabólicas. En una apuesta directa contra la obesidad, se pretende que el tejido adiposo blanco se transforme en tejido adiposo marrón, cuya particularidad es que no se acumula porque su función es producir energía. Por lo tanto, estos ensayos van a tener una importante aplicación en el tratamiento personalizado de la diabetes, obesidad mórbida y las enfermedades metabólicas en general. La estrategia que se contempla a largo plazo es llevar a cabo la fase de investigación preclínica y llegar posteriormente a la fase en humanos.
El proyecto Humanfarma, financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación, tiene un importante efecto incentivador para la mejora de la salud en general, y para el desarrollo de un partenariado público-privado en el descubrimiento de fármacos en España. Coordinado por Vivia Biotech SL, participan diversas empresas biotecnológicas con investigación y tecnología punta y diversos centros de investigación públicos de excelencia, tales como Vivia Allosterics, Oryzon Genomics, Galchimia, Parc Cientific de Barcelona y la Universidad Santiago de Compostela.
La gran ventaja de este proyecto, como apunta Alberto Álvarez, además de los beneficios para la salud y el bienestar de los pacientes, pasa por demostrar que la colaboración entre la empresa privada y la universidad produce resultados, tanto en la financiación de proyectos como en la aplicación de resultados de investigación científica básica a la sociedad.